Ángel Pizarro, actual párroco del templo, aseguró en entrevista a Diario El Día que el fuerte fervor popular se instaló el año 1879, luego de la Guerra del Pacífico, dado que el poblado de Tongoy era un puerto de embarque de provisiones para la guerra y al regreso, los chilenos trajeron muchos objetos como triunfo de la batalla.
“Entre joyas y tesoros varios, traían la imagen de esta virgen y otra idéntica que se fue a Santa Rosa de Pelequén, en la sexta región”, relata.
Esta sería la razón por la cual en nuestro país, existe la devoción hacia esta virgen. Incluso en un archivo parroquial se detalla un inventario con varios objetos de valos. En el documento "se habla de un cáliz de oro, vestiduras del sacerdote, de los altares laterales, imágenes sagradas del altar y que si uno observa en la actualidad, no se encuentran", explica el párroco el año 2011 refiriéndose a un rumor que señala que habría sido un cura el que quémo mucha ocumentación antigua sin saber su importancia. Incluso la actual imagen de Santa Rosa de Líma no sería la original sino una réplica.
En cuanto a la relación de esta parroquia con la comunidad tongoyina, Ängel Pizarro destaca que que ha sido clave la valoración hacia los distintos sacerdotes que por allí han pasado. "La comunidad destaca al padre Pedro Vega. Lo recuerdan con mucho cariño. tenía perros y era periodista. Acá tenía un semanario que se llamaba "La Luz" con informaciones del pueblo, le gustaba divulgar lo que estaba pasando".
Otros sacerdotes destacados por la comunidad fue José Moreno, quien trabajó en el templo cerca de los años '70. Otros son Alejandro Silva, Sergio López y Luis Alberto García.
Salida de misa año '70
Donada Por Julio Veas en el marco del Programa de Memorias del Siglo XX